
Millones de personas en los Estados Unidos tienen enfermedades tiroideas. La mayoría es mujer. Si padece de una enfermedad tiroidea, su cuerpo consume la energía más lenta o más rápidamente de lo debido. Una glándula tiroides que no sea lo suficientemente activa, hipotiroidismo, es mucho más común. Esta puede provocar que suba de peso, fatiga y dificultad para lidiar con las bajas temperaturas. Cuando la tiroides es demasiado activa, produce más hormona tiroidea que aquella que el cuerpo necesita. Ese cuadro se llama hipertiroidismo. El exceso de hormona tiroidea puede hacerlo bajar de peso, aumentar la frecuencia cardiaca y hacerlo muy sensible al calor.
Existen muchas causas para ambos cuadros. El tratamiento involucra tratar de reajustar el metabolismo corporal hasta un índice normal.
Anticuerpo antimitocondrial
Los anticuerpos antimitocondriales (AAM) son sustancias ( anticuerpos) que se forman contra las mitocondrias, una parte importante de las células. Las mitocondrias son la fuente de energía en el interior de todas las células humanas y ayudan a que dichas células trabajen apropiadamente.
Este artículo aborda el examen utilizado para medir la cantidad de anticuerpos antimitocondriales en la sangre.
Forma en que se realiza el examen
La sangre se extrae de una vena, usualmente de la parte interior del codo o del dorso de la mano. El sitio de punción se limpia con un antiséptico. El médico coloca una banda elástica alrededor de la parte superior del brazo con el fin de aplicar presión en el área y hacer que la vena se llene de sangre.
Luego, el médico introduce suavemente una aguja en la vena y recoge la sangre en un frasco hermético o en un tubo adherido a la aguja. La banda elástica se retira del brazo.
Una vez que se ha recogido la muestra de sangre, se retira la aguja y se cubre el sitio de punción para detener cualquier sangrado.
En bebés o en niños pequeños, se puede utilizar un instrumento puntiagudo llamado lanceta para punzar la piel y hacerla sangrar. La sangre se recoge en un tubo pequeño de vidrio llamado pipeta, en un portaobjetos o en una tira reactiva. Finalmente, se puede colocar un vendaje sobre el área si hay algún sangrado.
Preparación para el examen
Es posible que el médico le solicite a la persona no comer ni beber nada durante 6 horas antes del examen (generalmente durante la noche).
Lo que se siente durante el examenCuando se inserta la aguja para extraer la sangre, algunas personas sienten un dolor moderado, mientras que otras sólo sienten un pinchazo o sensación de picadura. Después, puede haber una sensación pulsátil.
Razones por las que se realiza el examen
El médico puede ordenar este examen si la persona tiene signos de daño hepático. Se utiliza con mayor frecuencia para diagnosticar cirrosis biliar primaria.
También se puede utilizar para establecer la diferencia entre cirrosis relacionada con el sistema biliar y problemas hepáticos debido a una obstrucción, hepatitis viral o cirrosis alcohólica.
Valores normales
Normalmente, no hay anticuerpos presentes.
Significado de los resultados anormales
Un resultado positivo puede indicar:
Hepatitis autoinmunitaria
Cirrosis
Obstrucción hepática
Cirrosis biliar primaria
Artritis reumatoidea (esta enfermedad se puede presentar junto con cirrosis biliar primaria en algunos pacientes)
Lupus eritematoso sistémico
Tiroiditis
Cuáles son los riesgos
Las venas y arterias varían de tamaño de un paciente a otro y de un lado del cuerpo a otro, razón por la cual obtener una muestra de sangre de algunas personas puede resultar más difícil que de otras.
Otros riesgos:
Sangrado excesivo
Desmayo o sensación de mareo
Hematoma (acumulación de sangre debajo de la piel)
Infección (un riesgo leve cada vez que se presenta ruptura de la piel)
Fuente: Mark James Borigini, MD, Rheumatologist in the Washington, DC Metro area. Review provided by VeriMed Healthcare Network. Also reviewed by David Zieve, MD, MHA, Medical Director, A.D.A.M., Inc.
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