
Los investigadores alimentaron a ratones con una familia de bacterias y registraron que se desataba la producción de ciertos glóbulos blancos, llamadas células T reguladoras.
"Aumentar las células T reguladoras ayudará a suprimir muchas de nuestras alergias y enfermedades autoinmunes", dijo uno de los científicos, Kenya Honda, profesor adjunto de inmunología en la Universidad de Tokio.
Este tipo de células son glóbulos blancos que regulan el sistema inmunológico e impiden que tenga reacciones excesivas.
Cuando un sistema inmune se sale de control, pueden surgir alergias. También se pueden destruir células y tejidos sanos y aparecer enfermedades autoinmunes como la artritis reumatoide, la psoriasis y la enfermedad de Crohn.
Honda y su equipo, que publicaron sus resultados en la revista Science, usaron antibióticos para hacer salir a todas las bacterias de los intestinos de los ratones.
Luego alimentaron a los animales con 46 especies de una bacteria Clostridium inofensiva y hallaron que las células T reguladoras volvían rápidamente a sus cólones.
"Las 46 cepas fueron aisladas de los ratones sanos, con partes traseras convencionales", dijo Honda por teléfono. "Y las cepas fueron suficientes para la inducción de células T reguladoras a sus cólones", agregó.
Los investigadores alimentaron a los ratones normales con las bacterias y descubrieron que producían niveles elevados de las células T reguladoras en sus cólones. Estos roedores normales también pudieron combatir algunas alergias y colitis, una enfermedad autoinmune, explicó Honda.
De cara al futuro, el autor dijo que los expertos pueden estudiar la capacidad de incluir bacterias Clostridium vivas a los alimentos fermentados.
"Podríamos usar especies de Clostridium vivas en los probióticos, como el yogur. Tomando especies de Clostridium se podría aumentar el nivel de células T reguladoras en los intestinos y las respuestas alérgicas estarán protegidas", sostuvo.
Los probióticos son microorganismos vivos considerados buenos para sus huéspedes.
Hay muchas otras cepas de Clostridium, algunas de las cuales son nocivas, como una que causa el tétanos y la Clostridium difficile, una superbacteria resistente a los fármacos. Pero éstas no se encontraban en el cóctel suministrado a los ratones.
Fuente: Reuters Health
No hay comentarios:
Publicar un comentario