
"Se debería alentar a las mujeres con bajo riesgo de complicaciones a planificar su parto en el sitio que más le guste, si el sistema de atención del parto está bien equipado como para respaldar esa decisión", escribió el equipo dirigido por A. de Jonge, de TNO Quality of Life, en Leiden, Holanda.
Los resultados de esta investigación serán publicados en la edición de agosto de la revista BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology.
Faltan datos sobre la seguridad de los partos hogareños en las mujeres de bajo riesgo, en parte porque se necesitan estudios sobre cohortes muy grandes para evaluar resultados adversos relativamente raros.
Asimismo, el equipo explicó que la asignación al azar del hogar o el hospital como lugar de parto, que es lo que mejoraría la calidad del estudio, no es éticamente posible porque las mujeres suelen querer elegir el sitio en el que tendrán a su hijo.
El nuevo estudio, en el que se analizaron más de medio millón de partos de bajo riesgo planificados, se realizó en Holanda.
Bajo riesgo significa que las mujeres no habían tenido un parto por cesárea previo, no habían tenido complicaciones en partos anteriores y tenían entre 37 y 42 semanas de embarazo al momento del nacimiento de su hijo.
El estudio incluyó a más de 300.000 mujeres, que querían dar a luz en su hogar, más de 160.000 que habían planificado tener su parto en un hospital y más de 45.000 mujeres sin un lugar especialmente deseado para el parto.
La cantidad de muertes maternas y fetales en los partos hospitalarios y hogareños fue muy reducida, y prácticamente igual, como lo fue también la internación en una unidad de terapia intensiva neonatal.
"Hasta ahora, este es el estudio más grande disponible sobre la seguridad del parto en el hogar", afirmaron los autores.
Los resultados, concluyó el equipo, indican que con los servicios adecuados disponibles, los partos en el hogar son tan seguros como los nacimientos en el hospital para las mujeres con bajo riesgo de sufrir complicaciones.
Fuente: BJOG, An International Journal of Obstetrics and Gynaecology, agosto del 2009
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